El piloto de Coll de Nargó regresa después de cinco semanas de parón en las que ha estado recuperándose de la fractura de cuatro costillas
Pese a que se ha perdido dos citas del Mundial, el de WP Éric Augé llega a la segunda prueba del Campeonato de España de Enduro con hambre de todo
Estoy muy contento de volver a competir, porque ha sido un mes que se me ha hecho realmente largo. Es importante no haberme perdido ninguna carrera del Nacional y estoy con ganas de pelear delante y competir por la victoria”.
El último mes ha pasado a cámara lenta para Jaume Betriu. Desde que el piloto catalán se fracturase cuatro costillas a finales de abril mientras entrenaba sobre la moto, el proceso de recuperación ha sido intenso y exigente. Pero este mismo fin de semana volverá a la competición en la segunda prueba del Campeonato de España de Enduro, en Infiesto (Asturias), con ganas de pelear por la victoria.
La recuperación ha sido progresiva y el piloto de Coll de Nargó pudo empezar a ejercitarse muscularmente unas semanas después, con el objetivo de no perder tono. En la revisión a la que se sometió al mes de la caída, los doctores le dieron el OK tras ver que las fracturas habían soldado correctamente. Ahí comenzó el proceso de volver a subirse a la KTM 500 EXC-F y trabajar su musculatura intercostal, acortada debido a los daños sufridos.
Aunque durante estas cinco semanas el piloto de WP Éric Augé no ha podido participar en las dos primeras citas del Mundial de Enduro 2022 (Lalín y Portugal), no se ha perdido ninguna del Nacional. En la competición doméstica es líder de la categoría E3 y está en la pelea por la scratch, tras aplazarse la cita de Santiago de Compostela, inicialmente prevista para el fin de semana pasado.
“Estoy muy contento de volver ya a la acción. Ha sido un mes que se me ha hecho muy largo porque ha habido carreras del Mundial que me he perdido y ha sido muy intenso en el apartado físico. En seguida pude saltar a la bici estática y empezar a hacer algo de gimnasio, donde aproveché para reforzar mucho espalda y hombros. He querido evitar riesgos y hasta que los médicos no me han dado el OK después de un TAC al mes de la caída, no he vuelto a salir con la bicicleta. Estoy con muchas ganas porque cuando me subí a la moto por primera vez la semana pasada me encontré bien desde el primer momento, con alguna pequeña molestia, pero simplemente por la falta de rodaje”, desgrana Betriu.
“Estos últimos días he descansado de moto, pero he seguido haciendo físico para la primera carrera después de la lesión. Es importante que en el Nacional no me haya perdido ninguna cita, así que vamos a Asturias con muchísimas ganas de hacerlo bien, de empezar poco a poco, con mi ritmo habitual de menos a más. Intentaré estar delante y luchar por la victoria, que es mi objetivo. Luego nos quedaremos un par de días allí porque la Real Federación Española de Motociclismo hace una preselección para los Six Days”.
Pese a que sus objetivos en el EnduroGP han cambiado inevitablemente, y ahora se centrará en competir carrera a carrera, Betriu afronta con ganas las próximas semanas, que le llevarán de Infiesto a Carpineti (Italia, 24-26 de junio) y Coimbra (Portugal, 1-3 de julio).
“Después de este fin de semana tocará seguir entrenando con cabeza y constante para llegar a tope a final de mes, ya que tendremos dos pruebas consecutivas del Mundial, en Italia y Portugal. Me espera un buen mes de competición, que es lo más importante y lo afronto con todas las ganas posibles”, concluye, ilusionado por su regreso a la competición.
Jaume Betriu se produjo la lesión el 25 de abril mientras entrenaba, después de clavar el manillar en un bache e impactar con el lateral de su cuerpo. El catalán quedó boca arriba tras el impacto, sin llegar a deslizar, ni a dar giros sobre sí mismo, notablemente dolorido. Después de realizarse las pruebas médicas correspondientes, se le diagnosticaron cuatro costillas rotas, dos de ellas desplazadas y astilladas, y una contusión en el pulmón, pero sin grandes hematomas