La piloto de KH-7 y el KTM Enduro Factory Team inicia la temporada 2017 este fin de semana en Murcia con el objetivo de sumar las dos primeras victorias del año.
La barcelonesa buscará engrosar a 19 títulos mundiales su palmarés de récord.
“Me siento más preparada que nunca, pero también será más difícil que nunca”.
La conquista del sexto mundial de enduro femenino empieza este fin de semana para Laia Sanz en el GP de España. La piloto de KH-7 y el KTM Enduro Factory Racing disputará la primera doble cita del campeonato en Puerto Lumbreras (Murcia) con un objetivo claro: ganar las dos primeras carreras de la temporada 2017 para arrancar con buen pie la defensa del título.
La barcelonesa atesora cinco coronas consecutivas de la especialidad desde que debutó en 2010. Tras los primeros asaltos en la que entonces era una nueva disciplina para ella que simultaneaba con el trial, y a la que debía adaptarse, Laia empezó a imponer su ley a partir de 2012. Desde entonces, la de KH-7 se ha mostrado invicta hasta alcanzar el año pasado el récord de 18 entorchados mundialistas sumando los 13 títulos de trial que conquistó anteriormente.
Pese a los aplastantes guarismos, Laia Sanz no quiere sorpresas, más aún después del pasado inicio de temporada, que resultó más complicado de lo esperado, con una victoria en las cuatro primeras carreras. “El año pasado fue muy difícil por un cúmulo de circunstancias: el nivel subió mucho; empezamos el mundial en Finlandia y Suecia, que son dos carreras que, por el tipo de terreno, no estoy acostumbrada; entrené muy poco en enduro después del Rally Dakar y de Qatar; empecé con la nueva moto y me faltaba adaptación”, recuerda la de Corbera de Llobregat.
Por este motivo, la pluricampeona española se ha preparado mejor que nunca y, tras disputar la última edición del Rally Dakar (donde fue 16ª absoluta), seguido de un breve periodo de descanso, ha mantenido un intenso programa de pretemporada. Además de los entrenamientos en circuito con su KTM 350 EXC-F y las continuas sesiones en gimnasio, Sanz ha disputado más carreras preparatorias que nunca: la Bassella Race en febrero, la Clipsal 500 Superenduro-X de Australia en marzo y dos pruebas del Campeonato de España de Enduro (Oliana en marzo y Valdecaballeros en abril). Todo con la mirada fijada en salir de la prueba inaugural del mundial de enduro femenino 2017 con dos triunfos.
“A diferencia del año pasado me he podido preparar mejor, he podido entrenar, no he hecho rallys y después del Dakar me he centrado más en el enduro, para intentar empezar la temporada con buen pie y que no pase lo del inicio de la temporada pasada. Es el año que he tenido una pretemporada más completa y siento que he hecho las cosas mucho mejor. Aun así, es verdad que no he tenido tanto tiempo como mis rivales, que llevan más meses que yo preparándose”, explica.
El reto de conseguir el sexto título de enduro femenino no será fácil y Laia Sanz es consciente que sus principales rivales, la alemana Maria Franke (subcampeona 2016) y la británica Jane Daniels (tercera clasificada), volverán a ponerle las cosas muy difíciles: “Tengo muy claro que este año será similar al pasado porque Franke está muy sólida, terminó la temporada muy fuerte y volverá a estar todo muy reñido, seguro. Estoy mentalizada para sufrir un poco y no me pillará por sorpresa que las demás corran mucho porque sé dónde está el nivel, muy arriba. Me siento más preparada que nunca, pero también será más difícil que nunca”.
Laia seguirá con su KTM oficial, una 350 EXC-F a la que se siente muy acoplada y que será su mejor aliada: “Conozco muy bien la moto y me encuentro muy cómoda con ella, además ha mejorado respecto el año pasado a nivel de motor y cambio de marchas, principalmente”.
El GP de España de Enduro empezará este viernes con la disputa del Super Test, a modo de aperitivo de las dos carreras puntuables que se disputarán el fin de semana (la primera, este sábado 22 de abril y la segunda, el domingo). En cada una de ellas, las participantes tendrán que dar dos vueltas a un recorrido de 49 kilómetros con tres especiales.
Así valora el trazado la piloto de KH-7: “El enduro test me gusta bastante y ahí lo puedo hacer bien, el Cross Test creo que también se me puede dar bien, pero el Xtreme Test tiene mala pinta porque no es una extrema como tal, sino un circuito de motocross puro y duro en el que hay un palmo de fesh-fesh [tierra muy fina] y no quiero pensar cómo estará el terreno cuando las motos hayan rodado un par de vueltas por ahí. Por otro lado, al ser un circuito de motocross, Franke, que viene de esta modalidad, tendrá ventaja, así que tendré que procurar no fallar y evitar que me saque diferencia ahí. Será una carrera muy reñida”.