A sus 14 años, el corredor santiaguino espera adquirir toda la experiencia posible de esta competencia a la que pretende llegar el 2022.
Este año correrá por tercer año consecutivo el campeonato europeo y mundial de Karting CIK FIA, pero en la categoría adulta, y comenzará su incursión hacia los autos de Fórmula, en su carrera por los puntos que lo habilitan para correr en las máximas categorías del automovilismo.
Son dos los grandes objetivos que tiene Nicolás Pino para su futuro como piloto profesional. Ser el primer chileno en correr la Fórmula E y disputar la Fórmula 1.
A sus 14 años, “Nico” es el único piloto chileno haciendo la ruta necesaria para transformarse en piloto de élite corriendo desde el 2017 el campeonato mundial de karting CIK FIA en Europa en categoría junior, certamen que repitió el 2018 en circuitos de Francia, Italia, Bélgica y Suecia.
En la temporada 2019 pretende estar en la grilla de la mayoría de las fechas del circuito CIK FÍA, World Series Karting y Campeonato Alemán (cerca de 30 carreras), pero ya en serie adulto y comenzar su transición hacia los autos de Fórmula corriendo Fórmula 4 y Fórmula CODASUR en Chile, además de participar en los promisorios eventos de e-karting (la “Fórmula-e del karting”), donde compitió el año pasado obteniendo el segundo lugar en los YOUTH OLYMPIC GAMES disputados en Buenos Aires
Los objetivos de este año darán paso a su total ingreso a los coches de Fórmula 4 italiana y alemana el 2020, al Campeonato Europeo de F3 el 2021 y la Fórmula E y F2 el 2022.
Precisamente como parte de su desarrollo como piloto, es que Nicolás Pino estará presente en la fecha de la Fórmula E que se correrá este sábado en el Parque O’Higgins.
“Mi idea es poder conocer de cerca la carrera, a los pilotos, los coches y todo lo que rodea la competencia. La Fórmula E es uno de mis grandes objetivos, estoy preparándome para correrla en tres años más y esta experiencia es muy importante”, comentó el joven piloto, cinco veces campeón nacional de karting y que apunta a los más alto del automovilismo internacional